Sobre el proyecto Nova de Google

Google anunció recientemente en el Mobile World Congress de Barcelona el próximo lanzamiento de su proyecto Nova. Básicamente, éste consistirá en un operador móvil virtual con ciertas características innovadoras como, por ejemplo, que el terminal no estará ligado a una única red y se apoyará siempre en la mejor red disponible en cada momento, móvil o wifi, y restablecerá las llamadas de forma automática sin intervención manual del usuario. En principio, el proyecto se lanzará este año en Estados Unidos, aunque es posible que otros países le sigan. Además este lanzamiento podría apoyarse en un nuevo terminal.

Como es bien sabido, en los últimos años, los operadores de telecomunicaciones tradicionales y las compañías tecnológicas como Google, han mantenido un pulso sobre el rol de cada uno y sobre las diferentes regulaciones y diferentes condiciones de mercado a las que están sometidos dentro del contexto de la comunicación.

Por ello conviene analizar con detalle esta iniciativa de Google, que aunque es una compañía que se caracteriza por sus proyectos de innovación, y ya ha realizado proyectos en el campo de la infraestructura de telecomunicaciones, como el proyecto Fiber. En este caso concreto, puede tener consecuencias más transformadoras en el sector de las telecomunicaciones, que una vez más, demuestra su dinámica y continua evolución, difícilmente comparable a otros sectores.

No cabe duda de que ambas industrias, de una vitalidad constante, comparten, en el caso de la comunicación, objetivos pero con estrategias muy diferentes. Por un lado, los operadores de telecomunicaciones necesitan, para vender sus servicios, invertir continuamente fuertes cantidades de dinero en infraestructuras, redes, licencias, etc., que necesitan rentabilizar con la venta de accesos y, a poder ser, con más servicios, cómo la televisión. Las empresas tecnológicas, por su parte, no necesitan realizar esas inversiones, y lo que realmente demandan es que las comunicaciones lleguen a cuanta más población mejor. La rentabilidad la consiguen a través de la venta de los servicios que ya tienen. Favorecer el acceso es positivo para ellas, aunque no lo rentabilicen directamente, teniendo en cuenta además que se encuentran en posiciones financieras muy desahogadas y, en el caso concreto de las estadounidenses, con una fortaleza del dólar que les permitirá, llegado el caso, realizar inversiones considerables.

Por otro lado y aunque las dos industrias tienen una fuerte componente de innovación que transforman el sector, las empresas tecnológicas, sin embargo, sí pueden reinventar modelos de una forma más disruptiva, más ágil, por no tener todos esos activos de hardware y de red. Además, el conocimiento y el control de la tecnología de los terminales es un punto muy importante ya que realmente pueden modificar aspectos clave que impactan directamente en la experiencia del cliente. Los intentos de los operadores de lanzar sistemas operativos alternativos, para crear alternativas sostenibles y competitivas con Android e IOs, no parece que hayan tenido todavía suficiente éxito, al menos hasta el momento.

Pero un aspecto muy relevante a la hora de analizar esta iniciativa es la posición relativa respecto al cliente y la información que de él se puede recopilar, de sus hábitos y su comportamiento. Las empresas de telecomunicaciones tienen una gran cantidad de datos del cliente que ya están utilizando y que explotarán cada vez más en el futuro. Las empresas tecnológicas también tienen a su vez su propia información, pero situarse más cerca del usuario, dando un salto sobre las diferentes redes, puede ser una buena manera de incrementar y/o utilizar esos datos de los que disponen actualmente.

Por todo ello, la creación de este operador móvil virtual por parte de Google, con las características mencionadas, siempre y cuando consigan realmente mejorar la experiencia del cliente, puede ser un movimiento significativo para toda la industria. Seguro que todo el sector estará muy pendiente de cómo esta experiencia se desarrolla en el futuro.

Autor: José Ramón Vega, Director en el área de Telecomunicaciones de KPMG en España

Fuente: Cinco Días. Publicado el 6 de abril de 2015